LIBROS. Digital y papel

Los Dámasos, los Gerardos

La relación del Franquismo triunfante con la Generación del 27 no fue completamente negativa. Es cierto que Lorca fue asesinado, que Alberti tuvo que exiliarse o que a Hernández (genial epígono), ‘le murieron’ en la cárcel. Pero también es cierto que hubo otros grandes nombres de aquella generación que permanecieron en la España que resultó a partir del año 39.En el surgimiento e importancia de esta Generación tuvo mucho que ver el santanderino Gerardo Diego. De él es la antología publicada en 1932 (Poesía española contemporánea (1915-1931), ampliada en el año 34) en la que se recogían poemas de aquellos que acabarían marcando gran parte del devenir lírico de nuestra literatura en el siglo XX.
El que no les perdonó esa vida en una España dominada por los vencedores fue Pablo Neruda. El chileno escribió un poema a su amigo, el citado Hernández, que llevaba un título poco dado a equívocos: A Miguel Hernández, asesinado en los presidios franquistas.

Este poema tiene una estrofa que directamente interpela a Gerardo Diego y a Dámaso Alonso:

Que sepan los que te mataron que pagarán con sangre.
Que sepan los que te dieron tormento que me verán un día.
Que sepan los malditos que hoy incluyen tu nombre
en sus libros, los Dámasos, los Gerardos, los hijos
de perra, silenciosos cómplices del verdugo,
que no será borrado tu martirio, y tu muerte
caerá sobre toda su luna de cobardes.