De poemas y falos

Escuché una vez en la universidad a una muchacha afirmar que no había más poesía que la poesía de amor. Y lo soltó así, sin anestesia ni nada. Me dispuse a contestar, pero en el último instante previo a articular palabra algo me animó a guardar silencio. “Total, ¿para qué?”, me dije.
Eso de que la poesía comienza y acaba en el amor es una idea que me ha repiqueteado siempre. Igual la muchacha universitaria tenía un concepto del amor muy amplio y entendía también por amor la lucha por el prójimo, por la justicia, así como el odio, la exaltación de la patria o las divagaciones surrealistas. Vaya usted a saber… (más…)